En otra línea de evidencias, los reportes de diversos grupos de investigación sugieren un fuerte envolvimiento de la amígdala en el reconocimiento de expresiones emocionales.
Este tubo, de 14 cm de longitud y muy musculoso, se halla revestido de mucosa y tiene en su parte superior o rinofaringe la amígdala faríngea, formada por tejido defensivo.