Cuando lo llevaban por el callejón las asistencias, el gesto del torero era delatador y terrible: los ojos abiertos y extraviados y la tez blanquecina cerúlea de la muerte.
La zona es un paraíso para los fotógrafos, como las aguas cerúleas les permite centrarse en las especies más pequeñas como la de varios colores nudibranquios.
Cuando la tromboflebitis profunda es masiva, denominada flegmasia cerúlea dolens, el miembro comprometido se encuentra frío y de color violáceo, acompañándo se de gran malestar general.