Los nudillos de las manos aparecen finamente verrugosos, como resultado de la hipertrofia de las papilas, presente también en labios, región perianal y mucosas.
La leucoplasia verrugosa puede tanto extenderse y volverse erosiva como remitir; por último, la leucoplasia erosiva aumenta de tamaño más a menudo que remite.
Hiperplasia verrugosa: una dureza enrojecida en el extremo de la extremidad, que se convierte en una verruga en la etapa final, y puede ocasionar una infección general.